"No me digas que no Puedes" - Tony Melendez

Tony Meléndez historia de discapacidad y superación

Historia de Tony Meléndez el guitarrista sin brazos. En el mundo encontramos personas extraordinarias, que dejaron atrás la adversidad y a pesar de la dificultades que le pudiera presentar la vida, nos dan ejemplo, de coraje y valor, esta es la historia de:

Tony Meléndez.- Nació el 9 de enero de 1962 en el Hospital San José en Rivas, Nicaragua. Sus padres son Sarah Maria y José, quien es de El Salvador y llegó a Rivas para estudiar en la Academia Internacional de Agricultura de Nicaragua.

Tony nació sin brazos y con el pie izquierdo torcido debido a los estragos de un medicamento llamado "Talidomida" recetado a su madre. Ella no sabia que esta medicina tendría efectos secundarios dañinos en su hijo sin nacer. Al igual que a Tony, este medicamento causó que miles de niños nacieran con deformidades, sin brazos o sin pies.

Aproximadamente un año después de Tony nacer, su familia viajó a California - gracias a que su abuelo ganara la lotería de Nicaragua - para operar y corregir su pie izquierdo. Desde entonces la familia se queda en Los Angeles.

En la actualidad esta casado con Lynn Ann Zechman y tiene dos niños, Andrés y Maritza.

Tony y la guitarra.- La música siempre fué parte de la familia de Tony: su mamá toca el piano y su papa la guitarra. Ninguno en su familia tomó lecciones de música o aprendió a leer notas musicales, por lo que es evidente que el sentido del ritmo y un buen oido son características dominantes en la familia. Cuando niño, Tony veía a su papá tocar la guitarra y sintió el gran deseo de poderla tocar también. Siempre le pedía permiso hasta que un día su papá puso la guitarra en el suelo y le dijo "Tony, anda a lavar los pies". En aquel entonces "no se escuchaba bonito, no era música; era bulla, afirma Tony.

Fué los 16 años cuando inicia propiamente a tocar la guitarra. Vió a alguien afinar la guitarra diferente, le preguntó qué son las notas, afinó su guitarra y le salió. Aproximadamente a los 18 años ya se encontraba tocando para eventos especiales.

Antes de tocar en la Iglesia ya la gente estaba oyendo que Tony tocaba guitarra y se preguntaban ¿cómo toca la guitarra Tony? Cuando tocó en la Misa fue la primera vez que la gente lo ve tocar.

Muchas personas lo llaman "el hombre de los pies de Dios", a lo que Tony responde:

"Dios tiene algo tan especial, yo no tengo los pies de Dios, pero sí tengo el amor de Él, y si una persona me dice eso (pies de Dios) yo le digo gracias, porque por un momentito tal vez podemos ver algo muy positivo muy bueno, nos olvidamos de lo feo del mundo y nuestra vida y vemos tal vez un poquito de esperanza de Dios en unos pies que son sinceros, simples.

Para ayudar económicamente a su familia, Tony decidió cantar en una esquina en "Laguna Beach", una comunidad artística en la costa de California. Así estuvo por casi cuatro meses, varias veces a la semana, para ayudar a pagar la cuentas de su familia. En ocasiones personas se detenían para expresarle el ánimo que sentían al escucharlo cantar. Aunque conseguía dinero, la mayor parte del tiempo se sentía avergonzado de cantar allí. Es en esta etapa de su vida cuando recibe una carta para adicionar para cantarle al Papa Juan Pablo II.

A la muerte de Juan Pablo II, Tony le compuso una canción en homenaje.

Tony y Juan Pablo II.- El 15 de septiembre de 1987 Tony Meléndez participó en una actividad donde el Papa Juan Pablo II se reunió con los jóvenes durante su visita pastoral a los Estados Unidos. La actividad se llevó a cabo en el anfiteatro Universal de Los Angeles donde asistieron unos 6,000 jóvenes y otras 1,200 vía satélite desde San Luis, Denver y Portland. Cada ciudad le dió un regalo al Papa y la participación de Tony era el regalo de Los Angeles representando "valor".

Juan Pablo II abraza a Tony.- Tony cantó una canción titulada, Never be the same (Nunca se igual). Al terminar, toda la audiencia y Juan Pablo II se puseron de pie aplaudiendo en ovación. De repente, el Papa se acercó a Tony, lo abrazó y le dió un beso en la mejilla derecha. La algarabía de los presentes creció más. Los aplausos continuaban mientra el Papa regresaba a su silla. Cuando los aplausos se apaciguaron, Juan Pablo II dió la vuelta y dijo:

¡Tony, Tony, Tony! Tony, eres verdaderamente un hombre valiente. Nos estás dando esperanza a todos nosotros. Mi deseo para ti es que continúes dando esperanza a toda la gente.

Para Tony estas palabras fueron como decirle "Tony, tienes que ir a trabajar". Desde entonces Tony ha sido invitado a diferentes programas de televisión y a dado conciertos en los Estados Unidos y en otros países incluyendo Holanda, Italia, Israel, Japón, Filipinas, Canadá, México, Nicaragua, El Salvador y Venezuela.

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