Nelson Cardona ahora intentará conquistar las 7 cumbres más altas del mundo
En el año 2007 Nelson Cardona perdió la pierna debido a una caída desde 18 metros cuando subía el nevado Ruiz, a pesar de las múltiples lesiones que sufrió su cuerpo, tener la pelvis fraccionada, perder en su totalidad los dientes y afrontar severas fracturas maxilo-faciales, regreso a la vida gracias a su coraje y su espíritu de lucha para seguir engrandeciendo la practica que dio sentido a su vida, el montañismo.
Tras el accidente la vida de Nelson cabio de manera drástica. Debieron amputarle la pierna izquierda debido las graves lesión que sufrió en la caída. Sin embargo nada de esto menguó el espíritu tenáz de este atleta acostumbrado al éxito.
A pocos meses de la amputación, Cardona se recuperó –física y mentalmente– para ser protagonista de una hazaña que llenó de orgullo al país: él, junto a cinco militares, coronó la cima del Aconcagua, montaña ubicada en Mendoza (Argentina). Fue una expedición de pura fortaleza. Estos hombres, a pesar de tener una pierna amputada, demostraron que nada es imposible cuando se es grande de corazón. Pero los retos no pararon allí. Luego de subir la cumbre más alta del continente americano, su nuevo reto fue el monte Everest. El 17 de mayo de 2010, en compañía del montañista Rafael Ávila, Cardona, con todo y prótesis, se paró en la cima del planeta.
Esta montaña, de 8.848 metros de altura, le había dicho tres veces no (1997, 2001 y 2007), pero la obstinación hizo que Nelson no renunciara a este sueño. Esta cumbre, sin pierna, ahora valía el doble para él y para Colombia. Este manizaleño se convirtió en el tercer discapacitado en el mundo que escaló el Everest y el primer latinoamericano en alcanzar la hazaña.
Luego de brillar con este importante logro deportivo, los desafíos se multiplicaron. Para Nelson, alcanzar la cima de la montaña no significa el fin sino el comienzo de un nuevo proyecto, uno más ambicioso. Fiel a esta creencia, en este 2011 inició la preparación para terminar de conquistar las siete cumbres más altas de cada continente. Por si fuera poco, emprendió un nuevo camino en el atletismo. Con el respaldo de Coldeportes, actualmente entrena para ser uno de los atletas que representará al país en los Juegos Paralímpicos de Londres 2012.
Mientras se prepara para asumir sus próximos retos, Nelson dedica parte de su tiempo a la solución de conflictos en el grupo ‘La Cumbre Epopeya’. Con los conocimientos que ha alcanzado durante los 37 años que ha consagrado al montañismo resuelve problemas de comunicación y enseña a otros a asumir los desafíos que trae el día a día.
"Un golpe en una caída no es lo que hace fracasar realmente a un ser humano, sino la falta de voluntad para pararse y continuar ante la adversidad".
Para Nelson, alcanzar la cima de la montaña no significa el fin sino el comienzo de un nuevo proyecto, uno más ambicioso. Fiel a esta creencia, en este 2011 inició la preparación para terminar de conquistar las siete cumbres más altas de cada continente.
De regreso al Everest
¿Esperó con emoción ese regreso a la montaña?
Hubo nervios pero sobre todo ansiedad. En los días previos no dormí bien. Siempre estuve pensado en qué iba suceder y cómo lo íbamos a hacer.
¿Cómo fue regresar al Everest?.- Fue como ir por primera vez. Es diferente estar allá sin una pierna. No fue fácil, las condiciones fueron hostiles y hubo tragedias pero teníamos la convicción de que lo íbamos a lograr. Se impuso la fuerza mental sobre la capacidad física.
¿Qué fue lo más complicado que afrontó por su condición de discapacidad?.- Lo más difícil fue el descenso, yo había perdido en mes y medio nueve kilos. Esa baja me hizo perder volumen en la zona donde me pongo la prótesis. Se me abrió una gran herida por debajo de la amputación. Eso y una fuerte tormenta hicieron que el descenso fuera caótico. Estuve todo el tiempo al límite.
¿En algún momento tuvo miedo?.- Sí. No sabía qué iba a suceder con mi pierna por encima de los cuatro mil metros ni cómo iba a responder la prótesis, todo era nuevo.
¿Cómo lo recibieron los demás montanistas?.- En el campamento base habían 2.500 personas tras el mismo objetivo, y se volvió un atractivo ver a una persona que le faltaba una pierna intentando subir. Toda la gente me dio ánimo. Cuando bajamos hubo jolgorio. Los nepaleses, japoneses, ingleses y norteamericanos nos recibieron con una fiesta.
¿Cuál fue la mejor enseñanza que le dejó esta nueva cumbre?.- La discapacidad está en los pensamientos de la gente. Estar a 8.848 metros me enseñó que uno sólo alcanza el éxito cuando hace lo que le gusta, y le pone fe y corazón. Un golpe en una caída no es lo que hace fracasar realmente a un ser humano sino la falta de voluntad para pararse y continuar ante la adversidad.
El Aconcagua con los militares
- Después del accidente, usted regresó oficialmente al alpinismo en el Aconcagua. ¿Cómo fue esa expedición?
Con esto nos dimos cuenta que la discapacidad es sólo mental. Nos llevamos a cuatro soldados amputados para demostrarle a mundo de qué está hecho un colombiano.
¿Cómo se dio esa oportunidad?.- Me llamó el coronel Gabriel Cardona, el director de la oficina de atención al herido del Batallón de Sanidad, antes de mi amputación y me contó el proyecto.
¿Y por qué aceptó la propuesta?.- 15 días después de mi amputación yo dije quiero ir, quiero volver a la montaña. Y me encontré con esta oportunidad de ir a la Aconcagua, me dieron muchas ganas y arrancamos la preparación.
¿Cómo fue el reto estando en la nieve?.- No fue fácil, la montaña se cerró, hubo seis muertos. La gente nos veía ascendiendo y nos decían que hacer cumbre estaba imposible. Nos miraban a nosotros a los pies y sé que pensaban que nosotros éramos menos por ser ‘mochos’.
¿Qué recuerdo tiene presente en su mente?.- Cuando mi equipo se venía al piso los miraba y les decía: nosotros sí vamos a llegar. Vamos a probarle al mundo. Y así fue que el 22 de enero 2009 a la 1:10 de la tarde (hora argentina) estábamos parados en la cima del techo de América. Nos hicieron calle de honor y la gente escribía en la nieve 'fuerza Colombia'.
¿Esta experiencia marcó su vida?.- Me cambió de manera total. Me abrió la posibilidad de volver a lo que más amo. De volver a subir a las grandes montañas y de liderar a personas que está necesitando de una voz de aliento.
¿Qué nuevos desafíos tiene ahora en mente?.- Quiero alcanzar nuevos propósitos. Estoy entrenando para acabar de conquistar las siete cumbres más altas del mundo, las más altas de cada continente. Ya llevó dos como amputado (Aconcagua y Everest) y voy por las otras cinco montañas. Espero haber terminado este sueño al final del 2012, para convertirme en la primera persona con una prótesis alcanza este macroproyecto, el más codiciado en el alpinismo.
¿Cuándo inicia ese camino?.- La primera cumbre, el Kilimanjaro, está programada para el 18 de marzo. Luego a mitad de año viene el Elbrus, en Rusia. Después estaremos en el monte McKinley en el polo norte, cerraremos el 2011 con el Carstensz en Oceanía.
Está alternando el alpinismo con el atletismo…
Sí, en este momento también entreno para alcanzar la marca y clasificar a los Juegos Paralímpicos de Londres 2012 en las pruebas de atletismo 100, 200 y 400 metros. Es otro sueño que tengo.
Formando montañistas
¿Cómo asume su faceta en Epopeya?.- Quemé una etapa y era el momento de formar la gente. Es de lo más bonito que me ha pasado. Es toda una sumatoria experiencial adquirida en las montañas y transmitida a la empresa. Epopeya fue creada pensando en sacar a la gente del confort de la ciudad para que se reten a si mismos escalando hacia su interior utilizando la metáfora de la montaña.
¿En Colombia se pueden formar buenos escaladores?.- Sí. Lo importante es que tengan ganas. En Suesca (Cundinamarca) están las mejores escuelas de escalada del país. Tenemos grandes rutas y excelentes escaladores en roca y en montaña para formar a la gente que venga.
El colombiano cada vez se está inclinado más por el montañismo…
No hay tanta filosofía. Hasta ahora la cultura se está abriendo. A la gente le empezó a interesar cuando empezamos a escalar las grandes montañas del mundo y salimos por Suramérica y al Himalaya.
Las que vienen y las que conquistó
A las que irá
- Monte McKinley (Denali) ubicado en Alaska. La cima más alta del Ártico
- Monte Kilimanjaro, ubicado en Tanzania… Cima más alta de África
- Monte Elbrus, ubicado entre Rusia y Georgia. Cima más alta de Europa
- Monte Vinson, ubicado en la Antártica. La cima más alta de la Antártida
- Pirámide del Carstensz, ubicada en Indonesia. La cima más alta de Oceanía
Las cumbres conquistadas
- Monte Aconcagua, ubicado en Argentina. La cima más alta de
- AméricaMonte Everest, ubicado entre Nepal y Tibet, La cima más alta de Asia
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Dios formo al ser humano con capasidades y cualidades increibles, que asombran, tales como las de nelson cardona solo los que se atreven a volar tienen la oportunidad de correr o caminar.